Por
Mari C. LinaresVoy a contarte una experiencia vivida durante el tiempo que me ponen la quimio, que para mi es preciosa y que espero que a ti también te guste. A esto le puedes dar el tratamiento que quieras, la persona que compartió la experiencia, sabe que te lo iba a contar a ti y a tu hermano y que cabía la posibilidad que lo colgaras en la página.
El personal sanitario que nos atiende durante el tratamiento, son profesionales muy expertos en su materia y en otras que pasan mas desapercibidas, en este caso en concreto del que te voy a contar, se trata de una joven que además de ser muy buena en su profesión, le gusta mucho la música, toca el piano y ha cantado en un coro, todo esto lo tiene ahora un poco parado, pues tiene dos hijitos que le cogen mucho tiempo, además se hace todos los días 60 Km. para venir al trabajo y otros tantos para regresar. El caso es que me encuentro muy a gusto con ella, durante el cambio de turno un día le lleve
El cant dels ocells, y nos pusimos a tararear un poco a dos voces y me emocione un montón, entonces comprendí muy bien que la música es un lenguaje universal y que une a la gente, te puedes imaginar la situación, yo enganchada a la maquina y ella atendiendo a los enfermos y en nuestra mente esa maravilla de partitura que a todo el mundo sensibiliza tanto, di gracias mentalmente a tu hermano que tanta paciencia tiene conmigo, soy incapaz de marcar el ritmo con la mano y cantar al mismo tiempo, cuando vuelva seré la ultima de la clase, pero no se librara de mi. Dale un abrazo de mi parte y si lo crees oportuno se lo enseñas. Te dirá que soy una abadesa medio loca.
Como veras no tiene importancia, pero en ese momento y circunstancia, fue muy emocionante para mí.
[foto: Rafael Silvestre]