Por Chelín Payá
Cuando alguien me pregunta: ¿Dónde has ido de vacaciones? Contesto: a Monserrat y a Montesol, y no es una tontería...
Hoy, 30 de septiembre de 2011, hemos ido de convivencia, comida, relajación, disfrute... no pararía de decir cosas bonitas del día de hoy, hemos vuelto a reunirnos, y sigo dando gracias por tener unos amigos como los que tengo.
Ha sido un día completo, apenas llegamos ya se respiraba un buen ambiente... ¡también se respiraba una comida deliciosa! A mi me parecía un día de boda, todos contentos, no había sitio para la tristeza, cada uno daba lo mejor de si mismo y entonces pensé porque estaba yo allí.
El día que levante la mano en clase para participar en la formación del Coro de la Universidad, fue uno de los mas acertados en mi vida, tengo más inquietud en cantidad de cosas, me gustan tanto las clases de solfeo como las de canto, pero antes de empezarlas (las clases), siempre hay unos minutos donde el profesor nos comenta muchas cosas, y eso te enriquece. Creo que es ahí donde he aprendido música, entiendo y leo solfeo, se ya donde se coloca un clarinete en un concierto, el concertino ya sé lo que es, pero lo mas importante es que me ha enseñado a escuchar con atención y respeto a una persona que toca el violín en la calle.
Quien lea esto podrá pensar que es una tontería, pero es que yo antes de estar en el Coro no lo sabia y eso me da vida, pensamos y aprendemos igual, estamos muy bien juntos, en la clase, en la calle, en Montesol… ¡¡¡mejor en Montesol!!!
[foto: Rafael Silvestre]
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